Castillo de Amasya

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Dominando una cima de colina que ha estado fortificada desde la Edad de Bronce, el Castillo de Amasya ha sido reparado, restaurado y reconstruido por los muchos reinos e imperios que han controlado la región. Una vez que fue el corazón del reino póntico, el castillo permaneció en uso hasta el siglo XVIII, cuando perdió su importancia militar y finalmente cayó en ruinas. Hoy en día, los visitantes son libres de explorar el vasto complejo del castillo, donde encontrarás las ruinas de todo, desde baños turcos y mezquitas hasta arsenales y almacenes; ¡incluso hay un pasaje secreto! Y, por supuesto, desde la cima del castillo se recompensa a los visitantes con fantásticas vistas panorámicas. Aunque no están en el complejo del castillo, 18 tumbas de los reyes pónticos están talladas en el acantilado debajo del castillo. Ten en cuenta: debido a la caminata requerida, esta parada no se recomienda para personas con problemas de movilidad.