Dougga

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Habitada desde el 2000 a.C., Dougga fue la capital de un importante estado líbico-púnico antes de ser conquistada por los romanos. Aunque la ciudad era excepcionalmente rica, también experimentó un declive temprano. Los historiadores al principio pensaron que Dougga era un importante sitio religioso por la cantidad desproporcionada de templos, pero resulta que los residentes ricos los erigieron en agradecimiento por su buena fortuna. El más impresionante es el Capitolio del siglo II, dedicado a Júpiter, Juno y Minerva, que está preservado dentro de un fuerte de la era bizantina. Junto con los veinte templos, las calles adoquinadas llevan a los visitantes a un circo para carreras de carros, una gran villa, varios baños, dos arcos triunfales y un teatro que podría albergar prácticamente a toda la ciudad. Cerca del teatro se encuentra el único monumento cristiano de Dougga: una iglesia del siglo V con una pequeña cripta llena de sarcófagos. Al sur de la ciudad principal encontrarás el monumento prerromano más fino de Túnez: el Mausoleo Líbico-Púnico, que data del siglo II a.C.