Dunedin

About

Fundada inicialmente por la Iglesia Libre de Escocia, Dunedin (llamada así por el nombre gaélico de Edimburgo) creció en tamaño y estatura gracias a la fiebre del oro de Otago en la década de 1860. La ciudad fue concebida para abarcar el estilo arquitectónico romántico de las antiguas ciudades escocesas, lo que llevó a una mezcla de calles peculiares y grandes edificios. Algunos ejemplos de impresionantes edificios pueden verse en forma de la Estación de Ferrocarril de Dunedin, la Primera Iglesia de Otago y la Universidad de Otago, el establecimiento más antiguo de Nueva Zelanda y supuestamente el más hermoso del mundo. La cultura es algo importante en Dunedin, con atracciones que van desde la excelente visita a la cervecería Speights, hasta el Museo Toitu Otago Settlers con sus atractivas exhibiciones de la historia de la región. También hay un sendero de arte callejero de 90 minutos para seguir, con obras vibrantes y caprichosas repartidas por el centro.