Mulhouse

About

Mencionada por primera vez en el siglo XII, Mulhouse no se convirtió en parte de Francia hasta el siglo XVIII. Alrededor de este tiempo, la industria textil de la ciudad comenzó a despegar, transformando la ciudad fronteriza en uno de los principales productores de tejidos de Francia. Hoy en día, el compacto centro histórico es perfecto para explorar, con hermosas casas de entramado de madera y estructuras renacentistas coloridas en cada esquina. En la Place de la Reunion, los visitantes pueden admirar el templo neogótico de Saint-Etienne, que aún conserva las vidrieras de la iglesia del siglo XII que una vez estuvo en el sitio, y la farmacia, que ha estado en funcionamiento desde el siglo XVII. El Ayuntamiento del siglo XVI, ornamentadamente decorado, ahora alberga el museo de historia local. Hay varios otros museos en la ciudad, que van desde el Museo Nacional del Automóvil hasta el Musée de l'impression sur étoffes, que celebra la industria textil de la ciudad.