Rosenburg

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Este castillo bellamente conservado está encaramado al borde de un acantilado con impresionantes vistas. Inmediatamente después de entrar al castillo, los visitantes se encuentran en el campo de torneos rodeado por pasajes arqueados que evocan imágenes de espectadores animando competiciones de justas hace cientos de años. Una vez en el corazón del castillo medieval, no es difícil entender por qué se filman tantos cuentos de hadas aquí. Una visita a Rosenburg ofrece una maravillosa oportunidad para comprender la vida de la nobleza que vivía allí. Hay una excelente colección de armaduras, así como muebles y obras de arte espectaculares que contribuyen a la sensación única del castillo. No te pierdas los famosos jardines del castillo, donde rosas silvestres cubren un muro de más de 300 pies de largo y 30 pies de alto. Este increíble jardín de inspiración renacentista contiene más de 120 especies de rosas y una tentadora abundancia de fragancias, que inspirarán incluso al romántico más cínico.