Los Jardines Perdidos de Heligan

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Los Jardines Perdidos de Heligan fueron creados entre los siglos XVIII y XX por la familia Tremayne de Cornualles desde mediados del siglo XVIII hasta principios del siglo XX. En 1920, el propietario de la finca se mudó a Italia y alquiló la casa, dejando los jardines abandonados hasta el punto de que fueron reclamados por la naturaleza y olvidados. En la década de 1990, los jardines fueron redescubiertos y se emprendió un proyecto de restauración masivo para devolverlos a su antigua gloria. Hoy en día, los visitantes pueden admirar antiguos rododendros y camelias colosales, una serie de lagos alimentados por una bomba de carnero centenaria y 'La Jungla', un subtropical lleno de helechos arbóreos. Los jardines también tienen el último pozo de piñas de Europa, que se mantiene caliente con estiércol en descomposición. Entre el entorno exuberante, los visitantes también encontrarán un puente de cuerda birmano y las dos figuras famosas del jardín, la Doncella de Barro y la Cabeza del Gigante. Para más información, por favor visite www.heligan.com