Zaandam

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Con sus bonitas casas de madera pintadas, coloridos molinos de viento y encantador paseo marítimo, no te sorprenderá que en 1697 el zar Pedro el Grande se quedara en Zaandam durante su visita a los Países Bajos. Lo que podría sorprenderte es exactamente dónde se quedó: una pequeña choza de madera. No fue una elección al azar: pertenecía a un herrero (Gerrit Kist) que había trabajado para él en Moscú. El zar estaba en una misión de recopilación de información para modernizar su país y, por lo tanto, se hizo pasar por 'Pedro Michaeloff', un engaño que solo funcionó por un tiempo. La choza es la casa de madera más antigua que se conserva en los Países Bajos, aunque hoy en día está protegida bajo un exterior de ladrillo. El área de Zaanse Schans es única en Holanda, con sus filas de auténticas casas de madera coloridas, molinos de viento, panaderías e incluso un taller de zuecos en funcionamiento.