Hainburg an der Donau

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Asentada por los celtas en tiempos prerromanos, Hainburg an der Donau fue en gran medida olvidada por la historia. Después de la Primera Guerra Mundial, se convirtió en la ciudad más oriental de Austria, y su única fama era que era la última parada antes de llegar al Telón de Acero. Hoy en día, la ciudad ofrece a los visitantes una gama sorprendentemente diversa de atracciones. Las murallas fortificadas de la ciudad están bien conservadas, y aún quedan algunos edificios típicos medievales, como una casa de osario o un picota. Incluso puedes contactar a Donau Incoming (incoming@donau.com) para organizar una visita guiada medieval por la ciudad, donde un guía con traje de época te sumergirá en los 750 años de historia de la ciudad. De hecho, la 'Puerta de Viena' del siglo XIII es la puerta medieval más grande que se conserva en Europa y ahora alberga el museo de la ciudad. Elevándose sobre la ciudad se encuentran las ruinas del castillo de Hainburg, que ofrece a los visitantes una caminata desafiante y excelentes vistas.