Manzanar

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Contrariamente a la creencia popular, Alemania no fue el único país que tuvo campos de concentración durante la Segunda Guerra Mundial. Lo que mucha gente no sabe es que Estados Unidos también tuvo una solución impactante para lo que llamaron "el problema japonés". Cientos de miles de japoneses-estadounidenses fueron arrancados de sus hogares y enviados a campos en el desierto estadounidense. Manzanar es uno de los más infames. Con aproximadamente ciento cincuenta muertos, este campo era inhóspito y no estaba en condiciones ideales. Hoy en día, ya que casi todas las estructuras fueron demolidas, se ha preservado uno de los bloques residenciales con torres réplicas y una demostración de la vida en el campo.